Puig, el gigante español, es propietario de un universo de marcas importantes como Carolina Herrera, Nina Ricci, Paco Rabanne, Jean Paul Gaultier. Asimismo, posee las licencias de Prada, Christian Louboutin, Comme des Garçons; y fragancias Lifestyle.
Puig es una empresa familiar dedicada a la moda y a la producción de fragancias con sede en Barcelona (España). La compañia está dirigida en la actualidad por la tercera generación de la familia. En la actualidad, sus productos se venden en más de 150 países. Su facturación en 2018 alcanzó los 1.933 millones de euros en ingresos netos y los 242 millones de euros de beneficios netos. Puig posee cinco plantas de producción, de las cuales cuatro están situadas en Europa y una en México, produciendo 331 millones de unidades de perfume cada año.
Historia de la compañía
En 1914, Antonio Puig Castelló fundó la empresa, denominándose Antonio Puig S.A., orientando sus negocios a la fabricación de cosméticos y perfumes.
En 1922 la compañía lanzó el primer pintalabios elaborado en España, denominado Milady. Durante la década de 1940 la empresa comercializó la fragancia Agua Lavanda Puig. El fundador Antonio Puig trasladó su organizacion a un edificio situado en la calle Travesera de Gracia, en el barrio de Gracia de Barcelona. En los años siguientes, Antonio Puig delegó en sus cuatro hijos la toma de decisiones del negocio.
Expansión internacional
Puig construyó en 1959, una nueva fábrica en el Polígono Industrial Besós, en Barcelona y en Estados Unidos. Para 1968 abrió una filial en París e incorporó a la compañía la marca del diseñador español Paco Rabanne. En 1987 Puig adquirió definitivamente la casa de moda del mencionado modisto. Durante la década de los 80, alcanzó la expansión internacional al crear y comercializar todas las fragancias de la diseñadora venezolana Carolina Herrera, incorporándose a la empresa en 1995 en la sección de negocio de moda.
Puig Beauty & Fashion Group
En 1997 Puig se asoció con el actor español Antonio Banderas para crear la marca Antonio Banderas Fragrances. Al año siguiente la compañía adquirió la marca de Nina Ricci. Debido al crecimiento del negocio, en 1999 la familia Puig refundó la empresa con el nombre de Puig Beauty & Fashion Group, instalando tres líneas de negocio en su estructura: moda, cosmética y perfumes.
Siguiendo con esa política de expansión, Puig adquirió las compañías españolas Perfumería Gal y Myrurgia. Asimismo, se integraron las marcas Adolfo Domínguez, Massimo Dutti y Heno de Pravia, entre otras. En 2002, la firma de moda japonesa Comme des Garçons pasó a formar parte de la compañía y adquirió los perfumes de la marca italiana Prada. En la actualidad, Marc Puig, miembro de la tercera generación de la familia, es el Presidente Ejecutivo de la empresa.
Puig en la actualidad
En 2009, la compañía cambió su nombre comercial una vez más, para ser conocida simplemente como Puig.
Las últimas firmas que se incorporaron a la estructura Puig fueron las del diseñador italiano Valentino y la del francés Jean Paul Gaultier; sin embargo, ambas marcas les fueron arrebatadas por la firma francesa L’Oréal y el grupo francés Hermès, respectivamente.
En 2013, Puig trasladó su sede corporativa en Francia a la Avenida de los Campos Elíseos de París.
Durante el año 2014, como parte de la celebración del centenario de su fundación, inauguró una nueva sede en la plaza de Europa de Hospitalet de Llobregat, denominada Torre Puig, obra del arquitecto Rafael Moneo.
En los últimos años Puig adquirió nuevas marcas como la de Dries Van Noten, a la vez que ha impulsado el desarrollo de Penhaligon’s y L’Artisan Perfumeur.
El universo Puig
En una historia de lujo y poder, el universo de Puig, el gigante español es propietario de firmas como Paco Rabanne, Nina Ricci y Carolina Herrera, en el que se descubre otra forma de hacer moda y competir en la élite del sector.
Carolina Herrera es propiedad de una compañía española, creada en Estados Unidos por la diseñadora venezolana, pero adquirida en 1995 por Puig. La empresa familiar que no solo se ha erigido en el mayor grupo de lujo de España, sino que compite en un sector más agresivo como tendente a la concentración, donde los grandes conglomerados como Kering y Richmond, absorben todo lo que entra en su órbita a través de agresivas operaciones de compra. La última es la firma Tiffany & Co. en manos de LVMH.
Puig alcanzó en 2018 una facturación de 1.933 millones de euros y generó el 86% de sus ventas fuera de España. Su crecimiento se asienta en un catálogo de marcas de moda que incluye: Nina Ricci, Jean Paul Gaultier, Paco Rabanne y Dries Van Noten. Detrás de todas estas firmas —algunas, verdaderos iconos de la cultura francesa— hay un músculo empresarial español.
Ahora, Puig y la casa de moda del diseñador belga Dries Van Noten, fundada en Amberes en 1986, mantienen una alianza estratégica que establece las bases del futuro crecimiento de la marca.
Puig y su vínculo en el mundo de la vela
Puig financió la Copa del Rey de Vela entre los años 1984 y 2006. Fue el armador y patrocinador del velero «Azur de Puig», en la participación de los eventos náuticos más destacados a nivel internacional. Una de las tripulantes habituales del velero era la Infanta Cristina, hija menor del rey Juan Carlos I. Desde 2008, en colaboración con el Real Club Náutico de Barcelona, la compañía impulsa y patrocina la regata «Puig Vela Clásica» que se celebra anualmente durante el mes de julio, en aguas de Barcelona.
Referencias
https://elpais.com/elpais/2019/12/18/eps/1576671013_249989.html
https://es.wikipedia.org/wiki/Puig_(empresa)
https://www.puig.com/es/quienes-somos/conocenos